Esta situación es bastante común y refleja la incidencia de niveles de estrógeno en el trofismo y en el nivel de epitelización de la mucosa (vesical y vaginal). De hecho, las hormonas sexuales femeninas, y especialmente los estrógenos, actúan de la siguiente manera:
– promueven la epitelización del urotelio, el mantenimiento y la renovación de la integridad de la capa protectora de la GAG a la superficie de la pared interior de la vejiga lo que reduce la inflamación
– promueven el trofismo de la mucosa vaginal, limitando la formación de microlesiones y reduciendo así las posibles migraciones bacterianas a la vejiga
El período premenstrual es un momento del ciclo durante el cual el nivel de estrógeno se reduce en gran medida y estas funciones de protección se reducen. Esto favorece la aparición de episodios de cistitis aguda.
Para luchar contra este fenómeno, es posible apoyar el trofismo de la mucosa y combatir la inflamación con dos simples medidas preventivas:
– con el uso de una crema hidratante y suavizante a base de D-Manosa dos o tres días antes de la menstruación
– con la ingesta de un complemento alimenticio útil por sus propiedades suavizantes en la inflamación de los tejidos y la reepitelización de la mucosa de la vejiga (por ejemplo, Cistiquer)